Estoy siguiendo un plan de entrenamiento específico para poder enfrentarme con garantías a las exigentes subidas de las Alpujarras.
Como buen globero (véase el siguiente enlace en caso de desconocer el término; http://www.almeriamtb.es/globero.html), me paro mil veces a fotografiar el paisaje y a descansar, incluso si la cuesta sólo tiene cien metros, pero, en este recorrido tan exigente, quiero afrontar las elevaciones con cierta forma física para que mi cuerpo asimile mejor las horas de descanso y sueño.
A pesar de los calores durante la mañana y de la oscuridad por las noches, combino dos rutas muy diferentes durante la semana, una sólo de subidas (la celebérrima Subida de la Peseta, cercana a Almería capital) y otra completamente llana (Almería - Cabo de Gata).
Además de la preparación física, continúo con la planificación del recorrido.
La ruta en sí ya está definida por completo, pero aún sigo intentando reservar alojamiento en algún que otro pueblo, por lo que la idea de llevar conmigo una tienda de campaña vuelve a cobrar fuerza.
La próxima semana, comenzaré a centrarme en algunos útiles que necesitaré en el camino.
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